Y SI LAS CLÁSICAS FUERAN EN COLOMBIA?
En Pavé hemos creado diseños únicos inspirados en algunas de las carreras clásicas europeas, pero esta vez quisimos imaginar si las carreras clásicas que tanto esperamos de la temporada de primavera fueran en Colombia como serían, esto fue lo que se nos ocurrió...
Strade Bianche:
Esa carrera llena de hermosas y durísimas carreteras blancas en la región Toscana - en la que nos acabó de sorprender Egan con un 3er lugar - nos evocan algunos paisajes del altiplano Colombiano (Departamentos de Boyacá y Cundinamarca) llenas de verdes y en la zona central con una mezcla árida.
Que tal una Strade Bianche Colombiana, o mejor la Clásica del Altiplano que saliera desde Tunja, pasara por el puente de Boyacá, siguiera su camino hacia Samacá, continuara hacia Villa de Leyva, luego a Sutamarchán y terminando en Chiquinquirá? Seguro hay muchos tramos de sterrato en la región, pasa por lugares icónicos del país, varias de las ciudades más mágicas y nada menos que la tierra de algunos de los mejores ciclistas de nuestro país.
Tirreno-Adriático:
La carrera di due Mare es sin una duda una carrera muy especial, va de un lado de la bota italiana en el mar Tirreno hasta el otro lado en el Adriático en 7 etapas. Colombia es un país afortunado de tener due mare también, tenemos el pacifico y el atlántico, como sería la nuestra?
El olor a mar, a pescado frito, el gran puerto y las montañas tropicales serían el trasfondo para el inicio de esta aventura. La primera jornada sale desde Buenaventura en el departamento del Valle del Cauca, pacifico Colombiano, nuestro Tirreno y llegaría a Tuluá luego de recorrer 137 km y el alto de Loboguerrero al lago Calima.
La carrera continuaría acompañada de cultivos de caña de azúcar, soya y sorgo desde Tuluá cruzando el Valle del Cauca a través de 117 km, subiendo el alto de cerritos luego de haber pasado por Cartago y con llegada en el parque principal de Pereira, una oportunidad para los embaladores y puncheurs, el mar pacifico y el valle empiezan a despedir a los corredores, ya estamos al pie de la cordillera central.
En el tercer día de carrera el pelotón enfrentaría una cronoescalada épica de unos 22 km desde Chinchiná hasta Manizales, la montaña empieza a mostrarse con toda su tenacidad y la llegada al frente de la catedral basílica en la plaza de Bolívar sería uno de los momentos más especiales de la carrera, seguramente quien vaya de líder en ese momento tendría una gran presión encima, porque lo que viene no se pone más fácil.
El cuarto día luego de que los corredores han tenido la oportunidad de probar uno de los mejores cafés del mundo y bañarse en las aguas termales que brotan de las entrañas del Nevado del Ruiz partirían en una etapa calurosa hacia la ciudad de la eterna primavera, Medellín. Es una de las más largas de la due mare Colombiana, casi 200 km y pasando uno de los altos más icónicos, el Alto de Minas, 42 km de ascenso. La carrera seguro se pondría interesante, ataques y contraataques desde el inicio pues arranca descendiendo desde Manizales y luego de haber llegado a la vía Panamericana principal el recorrido hasta el municipio de la pintada es un falso plan en descenso - algunos repechos no muy largos ni muy pronunciados. Y ahí si a buscar piñones más favorables porque el Alto de Minas arranca tan pronto como cruzan el puente del río Cauca en la Pintada. La llegada a Medellín sería de no despegarse pues el descenso y el plan que siguen hasta la meta no dejan espacio para descansar.
El clima primaveral y la calidez de Medellín despedirían al pelotón que se dirige ahora en el quinto día hacia Yarumal, en una etapa de 120 km que se adentran en la cordillera occidental. El alto de Matasanos con sus 13.7 km de ascenso confirman que este es un país de pasos montañosos difíciles y con grandes diferencias de altura sobre el nivel del mar. El altiplano desde el municipio de Don Matías hasta Yarumal sería el escenario perfecto para ataques por la clasificación general, porque luego de Yarumal no hay más montaña, es la etapa definitiva, o no lo es tanto?
Finalmente la montaña se despedirá de la carrera de los dos mares Colombianos, saliendo en la sexta jornada hacia la ciudad de Caucasia en el norte del departamento de Antioquia. 160 km de descensos fríos, húmedos y arriesgados y de planicies que recibirán con un calor tenaz al pelotón, el río Cauca guiará a los valientes desde Puerto Valdivia hasta Caucasia que aseguraría una llegada de una fuga que se haya consolidado o un pelotón compacto que llegaría al embalaje grupal y donde nuevamente los embaladores y puncheurs que hayan sobrevivido disputarían la etapa del bajo Cauca.
Un buen asado, o un bocachico bien preparado les dará a los corredores energía para terminar esta carrera de dos mares Colombianos ya que falta sólo una etapa, la más larga y que requiere mucho endurance: Caucasia-Coveñas, la anhelada llegada al mar atlántico, el caribe Colombiano. 210 km de mucho calor, planicies con algunos vientos cruzados y un paisaje muy diferente al que ya se cruzó en el valle del cauca, el efe cafetero y la región norte de la cordillera occidental Colombiana son el escenario para la etapa definitiva, quien ganaría semejante carrera? Vale la pena soñarla.
Que otras clásicas se imaginan que podrían ser icónicas en Colombia amulando de las mas grandes del mundo? Cuéntennos en los comentarios.